Muchas vidas….

Cada ser con su mirada aporta al otro, muchas vidas y en ellas la posibilidad de conocernos, estudiar, armar y desarmar la historia.

Quizás, involucrarnos en un proceso, investigar las raíces humanas para comprender lo que somos en esta historia.

Pensar que el conocimiento se une al espíritu por conexión.

Amor, calma y disciplina. Ser comunidad y familia.

Cuanto mas estemos conectados mas vamos a navegar por ese conocimiento que enriquece nuestro espíritu y donde la gran llave es LA MEDITACION.

Conectar…

El ser humano está diseñado para meditar y para ello despojar ansiedades y expectativas es vital, tanto como conocer nuestro cuerpo.

Ese cuerpo como un instrumento para afinar nuestra melodía en el universo.

La sinergia de los chacras, la respiración, el habla que traduce a través de la glándula pineal y pituitaria, la entrada y salida de la energía.

Nuestro cuerpo como antena beneficiando la sincronía con el universo.

Buscar siempre la calma con la ayuda de la respiración, para enraizar y también para volar.

Honrar nuestro cuerpo, amar, recordar, servir al otro, no fraccionarse, con la intención pura de hacerlo, sin alteración.

Amar cada cosa de esta vida para que se sostenga en esta realidad. Alcanzar esa calma para otorgarla luego.

Buscar el equilibrio de todo nuestro interior. Abrir las ventanas para que entre la luz.

Construir el camino para reconocernos, para crear el foco necesario que nos permita creer y crear.

Necesitamos confiar en nosotros mismos, porque es adentro que la conexión se da y no necesitamos nombres, religiones o cualquier otra cosa que nos separe de ello.

Agradecer, conectar, comunicar y disciplinar nuestra existencia para lograr el equilibrio.

Un nuevo camino para transitar, con la certeza de que lo construimos entre todos. Todo es relevante y cada uno tiene el momento para desplegar sus alas.

Recordar…

Poder aportar un tiempo sin tiempo, un puente de abrazos, una mirada de apoyo, un sentimiento genuino de amor, manos abiertas y dispuestas.

Prestar atención, confiar, es elemento fundamental para trabajar la singularidad que expande la mirada.

Mirar al otro y trabajar pequeñas percepciones para construir, el otro es mi punto de partida.

Acompañar, contar mi historia, explorar e investigar las posibilidades, seguir el proceso, buscar la inspiración en el corazón, desarrollar y transferir.

Un camino de amor, paz, prosperidad, abundancia, sabiduría, salud, unión y progreso, donde el corazón es el puente.